Los dientes, un cuidado especial en la vuelta al cole

En unos días los más pequeños vuelven al cole y ya empezamos con los preparativos. Son muchas cosas las que hay que recordar: libros, cuadernos, bolígrafos, pero no podemos dejar de lado la higiene dental de nuestros hijos.

La vuelta a la rutina implica que pasamos menos tiempo con los niños, pero debemos acostumbrarles y asegurarnos de que se cepillan tres veces al día después de cada comida, especialmente si utilizamos el comedor escolar.

Patologías más comunes

Los problemas dentales derivados de la vuelta al cole surgen a medio o largo plazo, es decir, es difícil que podamos percibir de forma inminente una patología bucodental nada más volver.

Los nervios y estrés de empezar otra vez las clases pueden provocar tensión en la mandíbula de los más pequeños, lo que conlleva que los niños aprieten y rechinen los dientes. Esto puede generar diversos problemas como caries o desgaste dental.

Este estrés provoca que los niños estén menos concentrados, lo que conlleva que el cepillado sea de menor calidad, provocando aumento de placas bacterianas y la posibilidad de aparición de gingivitis. Pero esto no es todo, ya que los problemas generados por la ansiedad inicial, en el caso de ser duradero, también genera alteraciones de la articulación temporomandibular (ATM), que derivan en dolores de cabeza.

Cuidados dentales

Para prevenir estos posibles contratiempos en la vuelta al cole, os damos una serie de consejos.

• Asegúrate de que tus hijos son capaces de lavarse los dientes por sí solos y de la forma correcta.
• Comprarle un cepillo de dientes nuevo al niño al inicio del periodo escolar, que lo pueda elegir él, pero que se adapte a sus necesidades sin olvidar la higiene oral.
• Utilizar pasta de dientes especial para niños. Es decir, existen pastas de sabores para que a los más pequeños les sea más fácil recordar el lavado dental.
• Enseñarles a usar la seda dental.
• Asegurarse que se lava los dientes antes de acostarse, ya que es el lavado más importante.
• En caso de utilizar el comedor escolar, preguntar por la composición de los menús y sus azúcares, así como comprobar si los monitores animan a los niños a cepillarse los dientes.
• Pedir una cita con el dentista al comienzo del curso escolar para comprobar el estado de sus dientes.